Aquí, todos los miembros de la comunidad campesina participaban y sabían todo lo que se debe saber sobre el café, desde la mejor manera de cultivarlo y cuidarlo hasta qué partes deben desecharse y lo que hace que el café sea bueno.
Rebecca y el resto de estudiantes del Coffee Study Program fueron testigos de una experiencia compartida, un enfoque integrado nacido de la unión de la comunidad en su conjunto.
Para garantizar que las personas de Neiba y de otras áreas vulnerables en todo el mundo puedan prosperar se necesita ayuda. Las herramientas o los fondos podrían no estar disponibles para que sus conocimientos y experiencia creen un negocio capaz de proporcionarles medios de vida sostenibles.
La Fundación Lavazza, entre otros, está haciendo justamente eso, por ejemplo, ayudando a financiar equipos agrícolas —equipos que permiten a la comunidad procesar los granos de café y llegar a los mercados globales.
Rebecca cree que enfoques como este son clave.