Historias del Coffee Study Program de Lavazza
¿Es posible cultivar, cosechar y tostar el café respetando el medioambiente y la comunidad? ¡Los estudiantes Rebecca, Jia, Kanika y Stuart tienen la respuesta!
¿Qué es el Coffee Study Program de Lavazza?
El Coffee Study Program es el ejemplo perfecto del compromiso de Lavazza hacia la tierra donde crece nuestro café, los cultivadores que lo cultivan y las organizaciones locales que participan en su proceso de producción.
Como protagonistas del Coffee Study Program de Lavazza, cuatro estudiantes se embarcaron en una expedición para descubrir el mundo del café sostenible.
Veamos qué descubrieron estos cuatro estudiantes en su expedición.
A TRAVÉS DE LOS OJOS DE REBECCA
Como estudiante de agricultura y política medioambiental, Rebecca pensaba que tenía una idea clara de cómo serían las comunidades agrícolas. Sin embargo, cuando se unió a los cultivadores de Neiba, un pueblo en el sureste de la República Dominicana, esa idea se convirtió en algo más enriquecedor.
En Neiba, comunidad significa que cada uno de sus miembros está implicado y sabe cosas sobre el café: cómo cultivarlo y cuidarlo, de cuáles de sus partes hay que deshacerse y qué hace que un café sea excelente.
Durante el tiempo que estuvo con la comunidad, Rebecca se dio cuenta de tres cosas importantes: una, la comunidad necesitaba apoyo y herramientas para prosperar; dos, su trabajo iba más allá del mero empleo y producción: se trataba de una cuestión de empoderamiento; y tres, lo que les hacía tener tanto éxito era el compromiso de cooperación con la calidad más que con la cantidad de su café.
CÓMO PIENSAN LAVAZZA Y REBECCA POTENCIAR ESTAS COMUNIDADES
A Rebecca le gustó ver lo que la Fundación Lavazza estaba haciendo para apoyar a estas comunidades. Empezando por ayudar a financiar equipos agrícolas que hagan posible que estas comunidades procesen mejor los granos de café y puedan llegar a los mercados mundiales, tanto Rebecca como Lavazza esperan poder ayudar para que continue el legado de una comunidad cafetera y mejorar la calidad del café en todo el mundo.
A TRAVÉS DE LOS OJOS DE KANIKA
Para Kanika, el viaje empezó en la sede de Lavazza en Turín. Su viaje consistió en hacer un seguimiento de la producción de café hasta sus orígenes, hasta las plantaciones de café del Caribe.
En Turín, la ciudad natal de Lavazza, a Kanika le asombró la experiencia del café: “La cultura del café en Turín es algo especial”, comentó. “Aquí, la gente vive el café en el momento, en vez de usarlo como un simple impulso de energía”.
En Lavazza, el café era algo más que un simple producto. En cada paso de su ciclo, desde la producción hasta el consumo, el café afecta a las vidas de personas y comunidades de todo el mundo. Lavazza apoya a los productores de café con herramientas, inversiones y formación, independientemente de si se convertirán o no en socios comerciales.
UN VALOR CLAVE TANTO PARA LAVAZZA COMO PARA KANIKA
A Kanika le sorprendió gratamente descubrir que la RSC (responsabilidad social corporativa) era un valor clave en el que la marca se centraba. Al igual que Kanika, Lavazza no se limitaba a invertir dinero en estas comunidades, sino que también ponía su corazón en lo que hacía.
A TRAVÉS DE LOS OJOS DE STUART
El café forma parte de la familia de Stuart. En Uganda ayudaba y trabajaba con su abuela en la plantación.
Durante sus días en la República Dominicana con el Coffee Study Program, Stuart ha obtenido una nueva perspectiva sobre el cultivo del café: una perspectiva que se obtiene subiendo a una montaña.
“En mi país de origen, junto a mi abuela, cultivamos café. Pero lo cultivamos en terreno llano. Ver que puede cultivarse en las montañas fue una sorpresa.”
La nueva perspectiva de Stuart está formada por algo más que la mera altitud. Examinando el presente,
Stuart se preguntó: “¿Qué papel pueden desempeñar los jóvenes en la producción de café? La respuesta es simple: sigue el ejemplo de tu padre.
Cuando las generaciones jóvenes aprenden de sus padres, cultivando, cosechando y procesando el café juntos, sientan las bases de su propio futuro, creando un negocio económica y ambientalmente viable. “El café es generacional. Me encanta cómo las familias se unen para contribuir a un objetivo más grande”. - Dijo Stuart.
STUART Y LAVAZZA ESPERAN CAMBIAR LAS COSAS
Stuart considera que formar parte del Coffee Study Program es una oportunidad para participar en un gran cambio. Junto con Lavazza, su objetivo es proporcionar a las comunidades todas las herramientas que necesitan para afrontar los retos del actual cambio climático.
A TRAVÉS DE LOS OJOS DE JIA
Durante su estancia en la República Dominicana, Jia Yi, una joven estudiante de Desarrollo Internacional, tuvo la inestimable oportunidad de reunirse con las organizaciones que están intentando crear un mercado del café justo y gratificante.
Junto con empresas como la Fundación Lavazza se fundaron organizaciones como CONCAFED (Confederación Cafetalera Dominicana) y CODOCAFE (Consejo Dominicano del Café) para empoderar a los caficultores, hacer que se escuche su voz y crear espacios compartidos de diálogo.
Para Jia Yi estaba claro que estas organizaciones eran un claro ejemplo de cómo la unión puede servir de apoyo para la resiliencia de los cultivadores. “Como entidad, la Confederación es poderosa, pero unida a ONG y organizaciones como la Fundación Lavazza, adquiere aún más fuerza”, declaró Jia Yi.
POR QUÉ LAVAZZA Y JIA OPTAN POR CENTRARSE EN EL PRESENTE
A Jia Yi le quedó claro que el verdadero poder reside en la colectividad. En colaboración con la Fundación Lavazza, su objetivo es producir grandes cambios tomando mejores decisiones cuando se trata de las pequeñas cosas de la vida, como las decisiones cotidianas que tomamos en nuestras rutinas diarias.
