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Compensar las emisiones de carbono de las cápsulas Firma es un paso importante para el Grupo Lavazza, que tiene como objetivo que todas las empresas y productos del Grupo sean neutros en carbono, tal y como exige el Plan de Actuación hacia Cero del Grupo Lavazza. Esta ruta es coherente con el compromiso del Grupo Lavazza de adherirse a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas, en particular, respondiendo a los objetivos ODS 12 (Objetivo de Desarrollo Sostenible: consumo y producción responsables) y ODS 13 (Objetivo de Desarrollo Sostenible: lucha contra el cambio climático).

En concreto, los proyectos de compensación tienen como objetivo reducir las emisiones de CO₂. Cada tonelada de CO₂ reducida o secuestrada genera 1 crédito de carbono.

Las reducciones (o secuestros) efectivas de emisiones se miden con precisión empleando metodologías de cálculo rigurosas y son verificadas por terceros. Tras este proceso de verificación, los créditos de carbono se emiten en el mercado y se ponen a disposición en un registro electrónico internacional de carbono. B28 De esta forma se hace un seguimiento y están disponibles públicamente todas las operaciones. Una vez que se han utilizado para la compensación, los créditos se retiran para evitar que se cuenten por duplicado. La compensación se lleva a cabo proporcionando apoyo a proyectos de reforestación, agricultura sostenible y energías renovables en países en desarrollo; esos proyectos se encuentran fuera de nuestra cadena de suministro y pueden generar créditos de carbono de calidad que cumplen las normas internacionales más estrictas (VCS, CCBA, MDL). 

Nuestro enfoque de neutralidad de carbono es un acto puramente voluntario. Esta ruta es coherente con el compromiso del Grupo Lavazza de adherirse a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas, en particular, respondiendo a los objetivos ODS 12 (Objetivo de Desarrollo Sostenible: consumo y producción responsables) y ODS 13 (Objetivo de Desarrollo Sostenible: lucha contra el cambio climático).

Nuestro enfoque de neutralidad de carbono comienza por reducir las emisiones en toda la cadena de valor de Lavazza, desde el cultivo del café hasta el final de la vida útil del producto, pasando por todas las etapas intermedias. Somos conscientes de que no es posible reducir completamente todas las emisiones y, por ese motivo, Lavazza ha iniciado un programa de compensación de carbono sobre las emisiones de carbono residuales, para aquellas que no se han podido reducir. En 2020 comenzamos nuestro viaje compensando las emisiones directas y logrando una completa neutralidad de las emisiones para las oficinas y las plantas de producción del Grupo. El objetivo final es alcanzar la neutralidad de carbono total compensando todas las emisiones indirectas, esto es, todas las emisiones generadas en toda la cadena de valor, desde el cultivo del café verde al empaquetado, y desde la distribución del producto final, el uso y la eliminación de los productos.

A nivel de producto, para el sistema Firma de café en cápsulas Lavazza, compensamos todas nuestras emisiones de carbono anuales relacionadas con los volúmenes vendidos.

La mayoría de los proyectos de compensación que existen actualmente se encuentran en países en desarrollo. Los beneficios sociales vinculados con estos proyectos tienen un notable impacto positivo en las comunidades locales que se encuentran donde se ejecuta el proyecto.

La compensación de las emisiones de carbono de las cápsulas Firma son un hito relevante del plan “Hoja de ruta Cero”, que tiene como objetivo reducir y compensar las emisiones indirectas durante toda la cadena de suministro anterior y posterior a las operaciones de Lavazza (café verde, envasado, transporte, eliminación). Además, para las emisiones directas, Lavazza ha reducido y compensado sus emisiones a nivel corporativo (plantas de producción, oficinas comerciales, oficinas) desde 2020. La neutralización de las emisiones indirectas se realizará de forma gradual y se logrará empleando cuotas anuales progresivas representadas por los productos y las marcas.

Todos los proyectos de compensación tienen como objetivo reducir las emisiones de CO₂. Cada tonelada de CO₂ reducida o secuestrada genera 1 crédito de carbono. Las reducciones efectivas de las emisiones (o secuestros) se miden con precisión empleando rigurosas metodologías de cálculo y son verificadas por terceros reconocidos por Naciones Unidas. Tras este proceso de verificación, los créditos de carbono se emiten en el mercado y se ponen a disposición en un registro electrónico internacional de carbono. De este modo se puede hacer un seguimiento y están públicamente disponibles todas las operaciones de compensación. Una vez que se han utilizado para la compensación, los créditos se retiran para evitar que se cuenten por duplicado. La compensación se lleva a cabo proporcionando apoyo a proyectos de reforestación, agricultura sostenible y energías renovables en países en desarrollo; esos proyectos se encuentran fuera de nuestra cadena de suministro y pueden generar créditos de carbono de calidad que cumplen las normas internacionales más estrictas (VCS, CCBA, MDL). 

La neutralidad de estas cápsulas incluye la compensación de las emisiones producidas durante el ciclo de vida del producto, desde el cultivo del café hasta el final de su vida útil, pasando por todas las etapas de producción, transporte y eliminación.

Esto incluye la recolección de materias primas, la fabricación del producto, la fase de empaquetado, el transporte antes y después y, por último, la fase de eliminación.

Dado que el cambio climático es un problema global, el impacto de una tonelada de carbono emitida en cualquier lugar del mundo puede neutralizarse reduciendo o capturando una tonelada de carbono en otro lugar: es el principio de la compensación de carbono (también denominada compensación de CO₂).

Esta reducción (o secuestro) de carbono se logra mediante proyectos de carbono específicos, muy a menudo ubicados en países en desarrollo.

Estos proyectos generan créditos de carbono, en donde 1 crédito es igual a 1 tonelada de emisiones de CO₂, reducida o secuestrada. El ahorro de carbono se realiza empleando metodologías reconocidas internacionalmente y se verifica periódicamente.

Además de la reducción o el secuestro de carbono, algunos de estos proyectos también proporcionan otros beneficios medioambientales, sociales y económicos, como la preservación de la biodiversidad, el empleo, el incremento del salario diario y el apoyo educativo y sanitario. Respaldar estos proyectos es una forma de mejorar los medios de subsistencia de las comunidades locales de una manera sostenible, al tiempo que se hace frente al cambio climático, y se contribuyendo así a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas.

La mayoría de los proyectos de compensación que existen actualmente se encuentran en países en desarrollo. Los beneficios sociales vinculados con estos proyectos tienen un notable impacto positivo en las comunidades locales que se encuentran donde se ejecuta el proyecto.

Nuestro enfoque de neutralidad de carbono comienza por reducir las emisiones en toda la cadena de valor de Lavazza, desde el cultivo del café hasta el final de la vida útil del producto, pasando por todas las etapas intermedias. Somos conscientes de que no es posible reducir completamente todas las emisiones y, por ese motivo, Lavazza ha iniciado un programa de compensación de carbono sobre las emisiones de carbono residuales, para aquellas que no se han podido reducir. En 2020 comenzamos nuestro viaje compensando las emisiones directas y logrando una completa neutralidad de las emisiones para las oficinas y las plantas de producción del Grupo. El objetivo final es alcanzar la neutralidad de carbono total compensando todas las emisiones indirectas, esto es, todas las emisiones generadas en toda la cadena de valor, desde el cultivo del café verde al empaquetado, y desde la distribución del producto final, el uso y la eliminación de los productos.

A nivel de producto, en el caso de las cápsulas del sistema de café Lavazza Blue, compensamos todas nuestras emisiones anuales de carbono relacionadas con los volúmenes vendidos.

Todos los proyectos de compensación tienen como objetivo reducir las emisiones de CO₂. Cada tonelada de CO₂ reducida o secuestrada genera 1 crédito de carbono. Las reducciones efectivas de las emisiones (o secuestros) se miden con precisión empleando rigurosas metodologías de cálculo y son verificadas por terceros reconocidos por Naciones Unidas. Tras este proceso de verificación, los créditos de carbono se emiten en el mercado y se ponen a disposición en un registro electrónico internacional de carbono. De este modo se puede hacer un seguimiento y están públicamente disponibles todas las operaciones de compensación. Una vez que se han utilizado para la compensación, los créditos se retiran para evitar que se cuenten por duplicado. La compensación se lleva a cabo proporcionando apoyo a proyectos de reforestación, agricultura sostenible y energías renovables en países en desarrollo; esos proyectos se encuentran fuera de nuestra cadena de suministro y pueden generar créditos de carbono de calidad que cumplen las normas internacionales más estrictas (VCS, CCBA, MDL).

Compensar las emisiones de carbono de las cápsulas Blue es un paso importante para el Grupo Lavazza, que tiene como objetivo que todas las empresas y productos del Grupo sean neutros en carbono, tal y como exige el Plan de Actuación hacia Cero del Grupo Lavazza. Esta ruta es coherente con el compromiso del Grupo Lavazza de adherirse a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas, en particular, respondiendo a los objetivos ODS 12 (Objetivo de Desarrollo Sostenible: consumo y producción responsables) y ODS 13 (Objetivo de Desarrollo Sostenible: lucha contra el cambio climático).

En concreto, los proyectos de compensación tienen como objetivo reducir las emisiones de CO₂. Cada tonelada de CO₂ reducida o secuestrada genera 1 crédito de carbono.

Las reducciones (o secuestros) efectivas de emisiones se miden con precisión empleando metodologías de cálculo rigurosas y son verificadas por terceros. Tras este proceso de verificación, los créditos de carbono se emiten en el mercado y se ponen a disposición en un registro electrónico internacional de carbono. B28 De esta forma se hace un seguimiento y están disponibles públicamente todas las operaciones. Una vez que se han utilizado para la compensación, los créditos se retiran para evitar que se cuenten por duplicado. La compensación se lleva a cabo proporcionando apoyo a proyectos de reforestación, agricultura sostenible y energías renovables en países en desarrollo; esos proyectos se encuentran fuera de nuestra cadena de suministro y pueden generar créditos de carbono de calidad que cumplen las normas internacionales más estrictas (VCS, CCBA, MDL).

Nuestro enfoque de neutralidad de carbono es un acto puramente voluntario. Esta ruta es coherente con el compromiso del Grupo Lavazza de adherirse a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas, en particular, respondiendo a los objetivos ODS 12 (Objetivo de Desarrollo Sostenible: consumo y producción responsables) y ODS 13 (Objetivo de Desarrollo Sostenible: lucha contra el cambio climático).

La neutralidad de estas cápsulas incluye la compensación de las emisiones producidas durante el ciclo de vida del producto, desde el cultivo del café hasta el final de su vida útil, pasando por todas las etapas de producción, transporte y eliminación.

Esto incluye la recolección de materias primas, la fabricación del producto, la fase de empaquetado, el transporte antes y después y, por último, la fase de eliminación.

Compensar las emisiones de carbono de las cápsulas Blue es un hito relevante del plan “Hoja de ruta Cero”, que tiene como objetivo reducir y compensar las emisiones indirectas durante toda la cadena de suministro anterior y posterior a las operaciones de Lavazza (café verde, envasado, transporte, eliminación). Además, para las emisiones directas, Lavazza ha reducido y compensado sus emisiones a nivel corporativo (plantas de producción, oficinas comerciales, oficinas) desde 2020. La neutralización de las emisiones indirectas se realizará de forma gradual y se logrará empleando cuotas anuales progresivas representadas por los productos y las marcas.

Dado que el cambio climático es un problema global, el impacto de una tonelada de carbono emitida en cualquier lugar del mundo puede neutralizarse reduciendo o capturando una tonelada de carbono en otro lugar: es el principio de la compensación de carbono (también denominada compensación de CO₂).

Esta reducción (o secuestro) de carbono se logra mediante proyectos de carbono específicos, muy a menudo ubicados en países en desarrollo.

Estos proyectos generan créditos de carbono, en donde 1 crédito es igual a 1 tonelada de emisiones de CO₂, reducida o secuestrada. El ahorro de carbono se realiza empleando metodologías reconocidas internacionalmente y se verifica periódicamente.

Además de la reducción o el secuestro de carbono, algunos de estos proyectos también proporcionan otros beneficios medioambientales, sociales y económicos, como la preservación de la biodiversidad, el empleo, el incremento del salario diario y el apoyo educativo y sanitario. Respaldar estos proyectos es una forma de mejorar los medios de subsistencia de las comunidades locales de una manera sostenible, al tiempo que se hace frente al cambio climático, y se contribuyendo así a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas.