
Luigi Lavazza era un hombre con una gran iniciativa, inventiva y pasión por su trabajo. Descubrió los diferentes orígenes y características de la planta, el café, y estudió el arte de la mezcla de orígenes para satisfacer los gustos de sus clientes. Así fue como nacieron los blends.
Después de su viaje a Brasil, fue capaz de ver el potencial de la bebida en una era de gran cambio. Los cafés Lavazza que hoy bebemos son el resultado de su idea de combinar cafés de diferentes partes del mundo.
La tienda se trasladó a un local nuevo y más grande en Via San Tommaso 10, donde los estantes estaban repletos de alimentos y productos cotidianos. El negocios floreció y las listas de precios se enviaban por correo.